el tiempo se detiene,
me despeño en las simas
de tus pupilas
y naufrago en los mares
de mis lágrimas.
Cuando estoy contigo
el mundo no gira,
cabalgas sobre las cimas
de mis muslos
y me enredo en la hiedra
de tus brazos.
Cuando estoy contigo
el día no amanece,
las palomas de mis manos
vuelan en pos de las tuyas
y me arroba el almíbar de tus besos.
Cuando estoy contigo
la vida me renace,
pues eres tú, amor,
quien me inspira la palabra,
quien me inspira el verso.
(Mayte Dalianegra)
Pintura: "Der kuss" (El beso), 1908, Gustav Klimt